¡La victoria tiene muchos padres, la derrota es huérfana!, dicen y dice bien esa viejo consejo, luego de registrarse la pasada contienda electoral que efectuada el pasado domingo en Coahuila, con el que llego a su término una fase más, del proceso que lleva a cabo cada organización política que se apresta a participar en la elección de junio intramuros de sus espacios y universos de participación, y que por cierto, en algunos, como es el caso del Partido Acción Nacional, ahora hasta este mismo viernes, cuando designen, a cual de sus aspirantes registrados, es decir, los muy desconocidos por estos rumbos Manuel de Jesús Hernández y Alejandro Daniel González, que no se sabe en calidad de que estarán quedando una vez que la alianza de este partido, sea más que un hecho en unidad con el Partido Revolucionario Institucional y el Partido de la Revolución Democrática, que en conjunto y bajo la singular designación de Alianza por la Seguridad Ciudadana, estará registrando a Manolo Jiménez Salinas como su abanderado, quien bajo el impulso que le da el haber sumado a su activo 503 mil votos que la militancia y simpatizantes le otorgaran en la jornada dominical, que por el resultado resultó ser mas que un ejercicio previo a la contienda constitucional, la demostración del músculo alcanzado por el priismo en Coahuila en medio de los avatares que registra este vieja organización partidista en el resto del país, y que diremos no es un resultado «de a gratis», sino que constituye la suma de la voluntad política de cuando menos dos gobiernos estatales al hilo, el encabezado por Rubén Moreira Valdés y continuado luego con terca persistencia y aumentado trabajo por el hoy gobernante Riquelme Solis, y ejecutado con rigor draconiano, y esto hay que señalarlo, por su dirigente estatal el ingeniero Rodrigo Fuentes Avila, y su equipo de colaboradores formales y los informales que se le fueron sumando en las últimas semanas, en las tareas de negociación con las diversas fuerzas e intereses que operan al interior de las filas tricolores, en especial en la zona centro y la norte, para presentar finalmente un organismo partidista donde destacó la unidad construida y alcanzada y que se expresa, sin mayores aspavientos en la alta votación en esta, su elección primaria.
Por cierto, en el Comité Municipal a cargo de la Senadora Verónica Martínez, fue el sitio donde se les viera reunidos, así haya sido por mero simbólico y mero trámite, a algunos de los ex alcaldes de este municipio, entre los que destaca el Licenciado Heriberto Ramos Salas, que por cierto también se le ha visto en algunos actos a cargo del Gobernador Riquelme Solis, pues al parecer ha superado viejos resabios con los tricolores que lo hicieran alejarse un tanto de ejercer alguna actividad partidista, también, en esta jornada a destacar las huestes que regentea el ex gobernador Rogelio Montemayor Seguy y de las cuales en esta comarca, representa Cristina Gómez de Dávila, si bien realzan tareas de promoción electoral a favor de Manolo, lo hacen cual organización adjunta al tricolor, pues como es conocido el ex mandatario renunció a sus filas hace algún tiempo.
Anote entre los integrados en las últimas semanas en tareas de orden partidista, al Ingeniero Lauro Villarreal Navarro que salió de la administración municipal de Torreón para realizar tareas partidistas muy específicas, y en espera de que se conozca la convocatoria para la elección de diputados en la renovación del Congreso de Coahuila, y en donde dicen tiene ya sitio separada para ser integrado al mismo, así sea por la vía plurinominal, dicen también,. Por ahora ninguno de los actuales diputados locales por Torreón abren boca para expresar deseo de continuar en el cargo, toda vez que la ley les permite una reelección, pues saben y bien, que no basta su voluntad si carecen ya no solo de la del Ingeniero Riquelme Solis, sino del visto bueno del candidato Jiménez Salinas de ahí que se advierta frecuentes procesos de mimetismo para poder parecer «Manolista» en espera de subir al barco, o barca de Noé donde habrán de sobrevivir especies o cuadros políticos priistas actuales, y que de antemano se sabe serán más que escasos pues las candidaturas de las 16 diputaciones de mayoría serán objeto de reparto entre los partidos en alianza y luego de los opositores que los gane, lo mismo pasará, en la elección constitucional del joven saltillense -apenas 38 años de edad-, en las áreas principales de la administración pública estatal, anticipándose ya que los cuatro laguneros estarán más que apretados, sin esperanza alguna de repetición de modo tal que quizás no tengan supervivencia, y algunos, dicen los que saben de esto también que ya presionan, «en busca de futuro» al alcalde Román Alberto Cepeda González, para que les ceda, o les invente algún espacio en su nómina, y que con todo y que el alcalde torreonense ha expresado que quienes quieran participar en la siguiente campaña, vayan renunciado a sus encargos, pues obvio es que se gestarían algunos sitios en la nómina municipal por ocupar.
En fin, que alcanzada la legitimidad de su candidatura el ya virtual candidato a gobernador Jiménez Salinas ha de estar por ahora, no solo palomeando las posibles candidaturas de los diputados al Congreso que lo acompañe a partir del primero de enero del 2024, y en el que tendrá que llenar espacios con quienes lo han acompañado en su trayectoria en la capital del Estado. No olvidar que una de las aportaciones más interesantes que se advierten con el posible arribo de el ex alcalde de Saltillo como el inquilino principal en el Palacio Rosa ha sido llevar a la participación a toda una generación de jóvenes coahuilenses, de donde sin duda y previa selección natural, talentos y méritos que registren sus integrantes, estará gestándose la nueva generación de la clase política en este Estado, que pueda romper la pesada inercia que se constituye sobre los espacios del poder público, la permanencia ad infinitum de capas y más capas de personajes y castas políticas y económicas que la han venido detentando desde hace ya muchos ayeres. Y que también debe expresarse ya en la próxima sucesión en la Máxima Casa de Estudios de Coahuila con todo y su autonomía.
Por cierto, ecos procedentes del municipio donde se asienta la capital del Estado, es decir Saltillo, están a la expectativa de cual será el proceder de su alcalde Chema Fraustro Siller luego de que le fuera «descobijado» su Tesorero, Juan Carlos Villarreal Garza y la red empresarial que montó y detenta para obtener contratos por adjudicación directa a cargo del erario público, a un grupo de empresas de las cuales, resulta ser socio, según exhibición expresa publicada en una periódico de la capital del Estado…
Y diremos que bajo más de medio millón de votantes, quedaron sepultados el ruido y la furia que desplegaban los actos de cierre de precampaña a cargo de los entonces aún precandidatos Armando Guadiana Tijerina y aun más, Ricardo Mejia Berdeja, en especial este último que con todo y que tal cierre lo realizó en estas tierras laguneras, se quedó «pajita» y no rugió como lo estila y quedó este domingo como tierno gatito y eso, que aun, no sabe aún que destino legal le espera una vez que el órgano electoral atienda las quejas y denuncias presentadas en su contra «por actos anticipados en campaña». Por ahora ha de encontrarse lamiendo sus heridas y las propinadas a sus seguidores, que fueron puestos en suspenso, más aún de patitas en la calle, cual purga estalinista por el órgano correspondiente de MORENA, luego de la insurrección encabezada por Yamilée Mtanous, y 21 miembros más de su Consejo Directivo, según dictamen de la comisión nacional correspondiente de MORENA a cargo de Mario Delgado. Entre estos hay que mencionar a dos novatos en las lides políticas, como lo son Lucía Inés Zorrilla Cepeda, que fungia como tesorera en tal organismo, así como su hijo, Luis Alberto Ortíz Zorilla, habilitados como dirigente de los jóvenes, ambos esposa e hijo de Víctor Ortiz, quien fungiera en Torreón como titular del Registro Público de la Propiedad durante el sexenio de Rubén Moreira Valdés y hoy, uno de los más fieros seguidores de Mejía Berdeja y como tales habilitados y ascendidos en cual jocoques a tales cargos directivos en MORENA en Coahuila, con tan prontos y pírricos resultados. Por lo pronto se escapó milagrosamente de tal chamusquina, el Licenciado Adrián Puentes Adriano.
Se comenta que incluso el candidato de la UDC-PVEM, Lenin Pérez Rivera, se llevó una buena tarde en el cierre de sus actividades proselitistas, sin tanto aparato, allá en la frontera norte de Coahuila.