¡Sin ritmo!, pero más serio aun, sin contenidos de impacto, que generen elemental competencia, entusiasmo, acompañamiento, adhesiones, o bien respuestas en contrario, transcurre el periodo que las leyes electorales del orden federal han dispuesto para que los aspirantes bien a la presidencia de la república, a las 300 diputaciones de mayoría y la camada senatorial correspondiente se encuentran en marcha las campañas en el período que la ley electoral establece para que los ya candidatos del orden federal con registro realizan sus campañas de convencimiento y otros de mera exhibición, para ser siquiera identificados por los potenciales electores, es decir que los conozcan siquiera.
Que diremos «de la campaña» de la fórmula senatoria que propone MORENA para Coahuila y que encabeza una por demás desconocida, sin mayor trayectoria política y partidista Cecilia Guadiana, por más y que haya heredado tal sitio a la muerte de su señor padre, acción que se atribuye como un acto de mera compensación a los buenos oficios y muchos pesos que el desaparecido Senador Armando Guadiana Tijerina aportó a AMLO, o como pago de alguna «cuota de género» y que pasó a «desgraciar» el futuro político esperado por su hoy compañero de fórmula, que no de vida Luis Fernando Salazar Fernández , toda vez que su otra fortaleza, de apoyo, claro, resulta ser el hoy delegado de MORENA en el Estado, vástago del gobernador de Tamaulipas.
Así ni modo de dejar en el tintero la campaña que realiza el candidato a diputado federal por el V Distrito Federal Electoral, que tiene como cabecera Torreón, Refugio Sandoval, «Cuco» para sus amigos, ahora bajo otra bandera, de la alianza que MORENA registra con el Partido Verde del cual el ahora candidato es líder moral vitalicio en Coahuila. Cuco hace recordar que hace algunos años, cuando el Partido Verde hacia alianza con el PRI, resultó ser pues un candidato híbrido, y como tal no arrojó fruto alguno tangible o intangible en su gestión como legislador. Y en esta ocasión por esas cosas de la vida Cuco resulta ser el candidato a diputado federal, bajo la alianza que el Partido Verde registra con MORENA. Vemos pues que Don Cuco, le da igual Chana, que Juana.
Y en el caso de Guillermo Anaya, uno de los pocos coahuilense que salvó la chamusquina que generó Marko Cortéz, tampoco se le ve nada, de campaña claro, pues ya se sabe, solo aparece de vez en cuando en alguna Medio regional, que para no perder costumbre, lo arropa con alguna entrevista, y qué decir hoy de Cinthia Cuevas, la rebelde morenista que se resiste a figurar solo como candidata a diputada federal en el VI Distrito, toda vez que se hizo grandes ilusiones de competir y ganar la postulación de MORENA y sus aliados por la presidencia del municipio más importante en la Laguna, solo portando con el presunto apoyo de tenedores de alguna de las tarjetas del Bienestar, sigue empecinada, en que haya revocación de decisiones y le cumplan tal deseo, que de ser así dejaría a Shamir Fernández en descampado, como ya han quedado un Miguel Batarse, un Jorge Luis Morán y hasta un ilusionado Simón Vargas junior, tal vez resulten incluidos siquiera como candidatos a regidores y síndicos, hecho que deberá consumarse no más allá del día 25 del presente. Fecha límite que también vale para la planilla que registra a Román Alberto Cepeda a la cabeza, y quien deberá dar a conocer la integración de quienes estarán acompañando en su fórmula para el cabildo a cargo.
Por lo pronto, el regidor Enrique Sarmiento Alvarez, quien ha solicitado ya de manera formal su reingreso al cuerpo edilicio del cual había solicitado licencia por tiempo indefinido y sabedor ya como lo es, que su intento por figurar como aspirante a la presidencia del municipio de Torreón resultó fallido.
En tanto que el destino laboral y político de otro aspirante, Xavier Herrera Arroyo es aún una incógnita, pues a su alrededor, hay solo silencio sepulcral sobre su destino, que si bien aparece más de la mano de otro ámbito de poder, el estatal, obvio no se ven señales de que logre sobrevivir y sobresalir de tal intención, y una vez que se le considero en los Medios políticos locales, como un fuerte prospecto a la candidatura de una de las dos diputaciones federales que están en juego en Torreón, espacio que finalmente le fuera asignado a Hugo Dávila Prado, único aspirante a diputado federal que hace talacha, gasta suelas recorriendo barrios y colonias de forma muy, pero muy tradicional, por lo que sus consejeros deberán mostrar capacidad de innovación en estas tareas, más allá de las estrategias basadas en el uso de las consabidas redes sociales, que la experiencia dice, no generan movilización ciudadana hacia las urnas.
Y qué decir, del Partido Acción Nacional, que vive una de sus etapas más sombrías, afectado a fondo, por la dispersión y disputas internas que se registran en su militancia y «cuadros directivos», y que han generado una crisis, al menos más que visible en Torreón, en la que mucho se duda, de que un líder del perfil del famoso José Armando Lumba, González Murrillo pueda superarla, al menos en esta elección.
La soberbia con la que se conduce el nóvel «dirigente» es motivo de comentarios más allá de los límites partidistas, cuando muestra puerilmente su aversión a algunos representantes de los Medios, no muy obsecuentes, cual si fuera el mismo un émulo de AMLO. No es para tanto, pero en su salud lo hallará, de paso afectará sin duda, los esfuerzos que para sacar a «ese buey de la barranca» realice el virtual candidato a alcalde Sergio Lara Galván, quien no rehuyó tal sacrificio, pues se dice que no ha logrado aún completar la propuesta de titulares y suplentes de la fórmula de cabildo del que estará acompañado.
Y non «Yo Sí», la campaña lanzada durante la pasada elección estatal, Mariano Serna Muñoz y Jorge Reyes Garcia, tratarán de repetir la estrategia de insertar agrupaciones que dicen constituye la sociedad civil organizada en la elección en marcha. Cabe decir que como novedad incluyeron en esta ocasión a la representación eclesial, que sin duda contó previamente con la aprobación del Obispo dela Diócesis, sino ¿cómo? , reacio como lo es a mostrar relación ni estrecha ni distante con agrupaciones políticas, y menos aún, con algún ámbito de gobierno.
Vaya caso, en el cual, al menos uno es de origen lagunero, miembros, según versión periodística -Alejandro N-, es miembro de una de las familias que forman parte del consorcio comercial Soriana, según lo señalan los Medios de Comunicación que publican la información del caso desde la población de San Miguel de Allende, Guanajuato, donde se iba a celebrar el festejo de bodas y se incendió el techo del lujoso y adornado local, siendo rápidamente consumido por el fuego y arrojando 25 personas lesionadas, cinco de ellas de gravedad, según reporte.