SALTILLO, Coahuila. 1 de octubre de 2021.- Al grito de “2 de octubre, no se
olvida”, la Facultad de Ciencia, Educación y Humanidades de la Universidad
Autónoma de Coahuila, llevó a cabo la conmemoración de los 53 años del
Movimiento Estudiantil de 1968, que culminó con la Matanza de Tlatelolco el 2 de
octubre de ese mismo año y en el que fallecieron cientos de estudiantes.

En el evento desarrollado en la explanada de la Facultad ubicada en la Unidad
Camporredondo, estuvieron presentes el rector de la máxima casa de estudios,
Salvador Hernández Vélez, el director del plantel, José Ricardo Ramírez Cerecero,
el catedrático e investigador de la FCEyH, Julio Cufarfán López y la maestra en
Historia, Katia Sofía Escudero Rodríguez.

Para iniciar la conmemoración, el profesor Julio Cufarfán López, realizó una
reseña histórica sobre la represión al Movimiento Estudiantil de 1968, hechos que
ocurrieron el 2 de octubre de 1968 en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco,
durante una de las manifestaciones en las que miles de estudiantes y ciudadanos
participaron para denunciar el autoritarismo del Gobierno.

En su intervención, el rector Salvador Hernández, explicó que el Movimiento
Estudiantil del 68 logró sentar las bases para alcanzar las libertades que se gozan
actualmente e impulsó la vida democrática en México, asimismo, despertó la
conciencia de la importancia que debe existir en la negociación pacífica entre las
autoridades de gobierno y la población, con el fin de evitar hechos de violencia.

“Esta lucha hay que recordarla y conmemorarla como un proceso permanente de
búsqueda de un Estado de democracia y la construcción de un concepto de
ciudadanía, así como de empoderamiento de la mujer, donde asumamos
compromisos que contemplen el respeto a la participación y el diálogo social para
generar bienestar y convivencia en la sociedad, es por ello que, nuestro gran reto
como universitarios y sociedad coahuilense es privilegiar siempre la expresión y el
debate de ideas para impulsar un interés y bien común”, dijo.

Por su parte, la maestra Katia Escudero, destacó que la lucha estudiantil además
de promover los derechos humanos y libertades sociales en ese contexto
histórico, permitió visibilizar y valorizar el papel de la mujer en el país, “A 53 años
de conmemoración, reconocemos a los estudiantes que participaron y dieron su
vida en el Movimiento, pero también recordamos a la Unión Nacional de Mujeres
Mexicanas conformada por jóvenes, maestras, madres y esposas que colaboraron
con la lucha, haciendo paros fuera de las universidades y comisarias con
compromiso y visión de cambiar el mundo”, señaló.

Durante la conmemoración, estudiantes de diversos semestres de la Facultad de
Ciencia, Educación y Humanidades leyeron textos de autoría propia, donde
resaltaron las semblanzas y memorias de algunos de los líderes del Movimiento
Estudiantil de 1968, a quienes reconocieron como “transformadores del mundo”
por su búsqueda incansable de libertad e integridad, desde su papel de actores
políticos y sociales.