Aquí Laguna.

‘»La  serpiente se mordíó la cola». Así parece, luego de conocer,  lo leído por   Alejandro Encinas   al rendir informe sobre la investigación a su cargo, correspondiente a la desaparición y búsqueda de los 43 estudiantes   de la Normal Rural Isidro Burgos de Guerrero, registrado la  noche que medió entre el 26 y el 27 de septiembre del 2014. Crimen de Estado, calificativo que sin duda cuesta trabajo mencionar y mas aun, esperar justicia plena   para todos y cada uno de los que estuvieron involucrados   no solo en el asesinato -obvio es que los jóvenes ya no existen-, sino el aparato conspirativo   conformado por altos mandos   militares, del  gobierno del Estado de  Guerrero,  policía  federal y policías municipales  y quien sabe cuantos mas del Cartel Jalisco Nueva Generación para montar luego todo un aparato de encubrimiento  que tenia como objetivo cubrir   el centro del problema: el narcotráfico y toda la red de   participantes en tan  lucrativo tema   que alcanzara  en ese tiempo y en ese lugar.

Tal situación no conocemos si sigue igual o parecida  en tales sitio, por la profundidad de  descomposición  que  el cobarde asesinato de esos jóvenes rebela a la estupefacta  población mexicana. Lo único  rescatable que deja este  terrible caso, resulta ser sin duda, la imbatible decisión de los padres de familia de los  estudiantes desparecidos, a quienes su tenacidad, resistencia  y negación a aceptar «la verdad oficial» que ofrecida, mantuvo «vivo» ante la opinión  pública  y con ella, la presión suficiente para que el actual régimen actuara, pero,  el caso no está terminado, es decir, no se ha hecho justicia plena, es mas aun ni siquiera se conoce dónde quedaron, si los hay, los restos de los jóvenes sacrificados, menos aun detenidos los implicados,  ya no solo en materia de autoría material, sino lo mas importante, de su autoría intelectual  es decir a los  la élite, si es que puede decirse así, de los   83 implicados, de los cuales 20, sí 20, pertenecen a las fuerzas militares y que incluyen  nada menos  a un hoy General de División  Alejandro Saavedra Hernández, por cierto uno de los militares que formó parte de la terna presentada a AMLO, por el entonces titular de la SEDENA, General Cienfuegos para que seleccionara a su sucesor en el mando de la SEDENA.

Tales revelaciones, entre otros detalles «finos»  tienen ya sujeto a proceso  judicial,  al ex Procurador  Jesús Murillo Karam  por lo menos  para que responda por tres delitos, pero sobre todo por el montaje de «la verdad histórica» bajo prisión preventiva. Veremos pues, si en el ámbito militar, AMLO envía al ato mando militar a que responda ante  un tribunal civil, al igual que otros mandos menores y tropa involucrados y no vaya a salir en su Mañanera, conque «yo tengo otros datos». De ser así, los mexicanos contaremos  con  mas argumentos para resentir, su decisión de pasar por alto la Constitución, al imponer que  la  Guardia Nacional, pase de derecho lo que ya en es de  hecho,  de facto pues,     convirtiendo a  sujetos de la milicia en las funciones policíacas, luego de éste quiebre, ésta mella que registra el ejército en su conjunto en el ámbito de la confianza y respeto  que había construído largamente en este país, con el incalificable  actuar de un grupo de sus miembros. En fin ya estaremos viendo el curso que siga este tema…

Si bien la esperanza muere al ultimo, a tres semanas del accidente de la Mina El Pinabete, ésta muere lentamente, ello se nota, cuando  el caso de los 10 mineros coahuilenses ya no ocupa el interés y las primera páginas de los Medios, relevado el tema por otros que se registran en el cambiante escenario nacional, e incluso estatal, como lo ha sido, en el ámbito local, la inesperada  renuncia que a la militancia en las filas del Partido Revolucionario hizo ya va para ocho días, el licenciado Shamir Fernández Hernández, no solo por el hecho de convertirse en un apóstata mas de la fe que lo nutrió  los últimos 20 años de su vida, sino por la «forma» como se deshizo de su militancia, eso si, sin presentar de modo alguno  licencia al cargo que ocupa  como diputado federal por el VI Distrito, y mucho menos al Fiat de Notario que se le concediera  graciosamente por el Gobierno de Coahuila

Se asegura que en el  colmo de  la simulación, esa conducta que alienta la traición. El hoy legislador «morenista» estuvo presente en la inauguración de la Reunión Nacional Plenaria de la diputación priista en el país, celebrada en Saltillo capital, incluso registró participación con una ponencia que finalmente   no realizó, pues en tal horario, se encontraba ya en la capital del país, leyendo su renuncia.

Ahora se aseguró que  el pial que mordió el ex priista   sonó a metálico, a billete pues,  y   lo tiró desde la capital del país, nada menos que el Secretario de Gobernación «padrino» del Bebesuario Ricardo Mejia Berdeja a quien la  aporta tierrita para que se fortalezca, pues al parecer nomas no pega en Coahuila.

Por lo pronto Shamir Fernández tendrá que rascarle a sus cuentas bancarias, si quiere aplicar un tanto la molestia, el enojo de «terceros perjudicados», es decir, de los mas de 30 elementos que formaban su equipo de trabajo, y que contaban con un ingreso derivado de su pertenencia a la nómina, de la cual fueron expulsados ipso facto, algunos como se conoce,  sin haber tenido vela alguna en tal entierro, como también le paso al hermando del diputado, que se venia desempeñando   como funcionario en la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas.

Por ahora no se conoce el destino que correrá la estrecha relación  que mantenía y presumía Shamir  Fernandez con la poderosa y controversial familia  que domina el territorio lagunero allende el Nazas  y mas aun cuando fungió como delegado especial priista en la reciente elección estatal, pero sobre todo la del municipio de Gómez Palacio. Vaya enredo, y mas aun cuando nuestro alcalde Román Alberto Cepeda, enfatiza su decisión de seguir en la búsqueda de la postulación  priista al gobierno de Coahuila, y quizás de la alianza partidista que se cocina para ello, pues un día si y otro también ratifica ante propios y extraños tal decisión o ambición, según quiera verse y ello, hay que decirlo, no abona ya  a la unidad indispensable que habrá de mostrarse y demostrarse  ante las batallas electorales en puerta. De ahí que tanto empecinamiento cuando todos los hados señalan que  el delfín en esta ocasión, será el saltillense Manolo Jiménez Salinas, de ahí que se  especule que Román Alberto quizás solo le este  jugando al tio lolo, para quedar  solo  cual patiño en la contienda electoral interna a la que convocará el PRI…

Y vaya que andan por ahí batallando para juntarle audiencia a la señora Esher Quintana,  quien éste jueves estará presentando  una conferencia  al panismo regional,  necesitados como están de «sustancia» ideológica  que les permita al menos enlistar en autocrítica  las razones por las cuales  éste organismo partidista se encuentra mas que diezmado, casi casi en proceso de extinción. Habrá  de preguntar  por ello, a un Guillermo Anaya y mas aun, a Jesús de León Tello, ambos mas que lideres morales, históricos  de ese organismo partidista que otrora diera  interesantes batallas     electorales…

Sin incidente alguno se registró el reinicio de la educación presencial  en la región.  Donde se enfrenta no solo el rezago académico de niños y jóvenes  derivado   de las condiciones que impuso la pandemia a lo largo de dos años y en la que aun no se puede levantar bandera blanca alguna. Así que prosigamos con las medidas mínimas de prevención vigentes.

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Author: Olga Quirarte Ramírez