¡Rocambolesco!  El resultado que a la fecha resulta de la rebeldía, que exhibe Ricardo Mejía Berdeja  y que corre sobre Coahuila, desde el pasado 12 de diciembre  una vez que dice haber «apechugado» que no admitido el resultado de la famosa y ya  pírrica  encuesta, que cual método  sine qua non de la 4-T  ha acuñado Andrés Manuel López Obrador y  en la que se alzó como ganador,  el Senador con Licencia Armando Guadiana Tijerina, en boca  del hoy defenestrado dirigente nacional de MORENA Mario Delgado, sobre el que ya  cuelgan  en señalamientos públicos del rebelde  ex bebesaurio   y que difunde  en Medios nacionales  bajo la inercia que   genera   su presencia y salida del cargo  como Subsecretario de  Seguridad del actual régimen federal,  le dan acceso solo para exhibir sus contradicciones    y  su  obsesión  de ubicarse como  detractor -solo eso-,  del Moreirato y el Gobernador de Coahuila, como el leit motiv que lo anima a tomar medidas de ser un mercenario, en tanto que en silencio avanza las decisiones que al respecto, que cual control de daños, imponga, el Presidente, so pena de que  éste episodio  se repita en la «grande»  si es que alguno de las corcholatas originales, es decir, Claudia Sheimbaum, Marcelo Ebrard y Adan Augusto López, mas las  dos agregados  en estos últimos días  -Ricardo Monreal y Fernández Noroña-, que por necesidad se han agregado, rechaza el resultado de la esperada encuesta y más aún, toma  las de Villadiego y con sus bártulos  se aleja de MORENA y su 4-T,   generando un escenario,  con impactos de pronóstico reservado  al cuadrado  en el país.

Ahora resulta que Mejía Berdeja, no era ni tan solo  militante del MORENA, y  solo era, como  otro sujeto, oportunista, parte del cascajo  político en este país,  pues a  lo largo del autoexilio  se cobijó con las siglas de Movimiento Ciudadano y se afincó en Acapulco, Guerrero, donde  dedicó  década y media en  la búsqueda de cargos públicos,    para luego   sumarse a la campaña de AMLO en la que nadó de muertito bajo la cobertura del hoy gobernador de Sonora Alfonso Durazo,  otro  saltimbanqui,  cual  personaje de lo mas versátil en materia ideológica,   como ejercicio de sobrevivencia   como uno más de los  «Viudos   de Colossio»,  luego del magnicidio de que fuera víctima., resulta que los temas reiterativos  a que  dedica Mejía Berdeja en sus afanes  en su lucha «contra el moreirato y Riquelme», sin que se registre huella alguna de acciones de palabra y mucho menos de hecho,  para combatir  política o jurídicamente   tal  moreirato   en alguna versión de este, es decir,  en el periodo que   cubrió Humberto Moreira Valdes,  seguido luego por  Rubén Moreira Valdes  y menos aún, durante  los cuatro años de la gestión que encabeza el ingeniero Miguel  Angel Riquelme Solis,  ya que fue hasta marzo del presente año, cuando Mejía Berdeja  le nació la ambición de insertarse como  sujeto político activo en Coahuila, bajo el amparo de su cargo como Subsecretario de Seguridad Pública  y abusando de  la supuesta -ahora sabemos que así fue-, complacencia del Presidente Andrés Manuel López Obrador  para  su promoción como aspirante al gobierno de este Estado.

Este ultimo subterfugio vaya que lo ayudo, para pescar a más de un incauto  para subirse al ring  electoral   tratando de colocar en este al Ingeniero  Miguel Angel Riquelme Solis, como su  blanco favorito, pero éste  hábil,  lo mantuvo a raya con desdén, con silencio, observándolo y de «lejecitos» como  se hundió  en su desbocada  ambición. Pero si esto fuera poco, resulta que el muy comedido  licenciado Reyes Flores Hurtado,  el super delegado del gobierno federal en Coahuila, cargo que alcanzó  luego de su pasado por las filas del Partido Acción Nacional, en el que figuró incluso como líder   de tal organismos partidista en el municipio de Torreón, en donde tras disenso con  el líder moral de tal agrupación, Guillermo Anaya, decidió alejarse de tales filas  y emprender desde la ciudad capital del Estado,  una lucha opositora y en tal tramo   encontró el cobijo de  Armando Guadiana Tijerina    encabezando  a los grupos que se pronunciaron por López Obrador. Reyes  Flores  se identificaba  al ex panista, como uno de los litigantes al servicio de Guadiana Tijerina, y como tal lo acompañó en  sus campañas de aspirante  al Gobierno de Coahuila, compitiendo contra Riquelme Solis,   luego  en la campaña  como candidato a Senador, en la que el empresario minero resultó ganador y el  ínter, Reyes Flores Hurtado no desdeñó para nada, figurar como el conductor del vehículo en el que López Obrador se presentaba  ante los coahuilenses, cercanía que  le  redundó en su designación como Delegado y desde ahí, resulta que también aspiró a figurar como  candidato al gobierno de Coahuila,   decisión que se afirma lo alejó un tanto de su  protector y ex jefe Guadiana Tijerina, pues ambos desearon  lo mismo en el mismo tiempo y espacio. Hoy resulta que a través de   Facebook Reyes Hurtado señala  a la dirigencia nacional de MORENA, de  haber realizado  su   encuesta  que designo a su candidato en Coahuila  de manera   más que  irregular,   que incluso  afirma «se escondió  su  convocatoria» si bien,   y al contrario de Mejía Berdeja no amenaza con irse   con sus ilusiones  a buscar cobijo  en otra parte, se muestra más  profesional,  exhibe  sino  un abismo, si grietas de consideración…

Por cierto, reportan «nubes» de encuestadoras, algunas procedentes de Baja California, contratadas exprofeso por el Partido del Trabajo, según dicen ellos mismos  para    formular «la oferta electoral» del Bebesaurio. Esta mañana las reportaron en la Colonia Valle Oriente, en tanto Guadiana Tijerina se hizo presente en Torreón el pasado sábado, si bien no alcanzó lleno completo, ni bienvenida apoteósica alguna en  la sede seleccionada para tal representación,  destacando entre los asistentes  Shamir Fernández, Rodolfo Walss  y  Jorge Luis Moran,  oficializando  con ello y ente los laguneros, que han dejado el barco de Mejía Berdeja y con fervor de nuevos conversos  se suman a las  filas de Guadiana Tijerina, patéticos personajes  pues…

Y en tanto Manolo Jiménez  Salinas destinó todo el martes pasado a posicionarse    ante  militantes y simpatizantes  del priismo y sus aliados,  en actos  realizados en el local del PRI Municipal, una vez que el alcalde  Román Cepéda Gonzáles ha dejado para otra ocasión  sus  aspiraciones de futuro. Interesante ha de ver sido, sin duda, la reunión sostenida  en incógnito sitio  con el precandidato saltillense con el grupo de ex alcaldes  de Torreón  aún sobrevivientes,  así hayan surgido de las filas del PAN  y del  PRI, pues ya se sabe, ahora  todos ellos  se encuentran en el mismo costal en donde los ubicó la alianza   partidista. Se ignora  la agenda de tal encuentro, y si fue invitado y asistió o faltó  José Angel Pérez  Hernández,  que ya se sabe, le gusta andar cual burro sin mecate, pues  en estas últimas semanas no aparece en escena alguna, para saber siquiera que opina del hecho de que Mejía Berdeja se haya alzado con  la precandidatura  para el cargo que alguna vez  iluminaran sus ambiciones.

Por cierto en este encuentro, dicen, destacó la asistencia del ex alcalde Heriberto Ramos Salas,  que compartió sitio con el ex alcalde Jorge Zermeño Infante. Cosas veredes, Sancho.

Y entre estas se encuentra  la licencia obtenida por el Ingeniero Lauro  Villarreal,  al cargo como titular de SIMAS-Torreón cargo en el que no lo estaba  haciendo nada  mal, dado las condiciones en las que recibió la empresa paramunicipal,   y en  donde por cierto no se conoce aun quien será su relevo por  los días que le toque estar en búsqueda de una precandidatura, o finalmente como  candidato  a diputado local,    en  la que  compite no solo con el  regidor también con licencia Felipe González,  y hasta con la arquitecta Isis  Cepeda, incluída  se  supone no solo por lo que se ofrezca en eso de la Cuota de Género, sino  que  dicen los mal pensados, para  tenerla como rehén, por aquello  del «no te entumas», es decir, en el   blindaje  interno del PRI por aquello de que haya antojo alguno de  defecciones y traiciones.

Por cierto, a solo tres días de haber iniciado precampaña, se advierte ya debilidades, omisiones, vacíos   en materia de información y comunicación, por no citar también su área de relaciones públicas,  de parte de los responsables -si es que los hay-,  del área y sus jefes en el Comité municipal  de éste organismo político, pues   la batalla por aire está  ya  a todo lo que da, incluso,   Lenin Pérez  Rivera, bajo las siglas del PVEM y de la UDC   aparece ya en varios espectaculares, promocionado sus objetivos como  precandidato de las siglas mencionadas, por el Gobierno de Coahuila, amén de que apenas el pasado lunes, mantuvo ya   una nueva relación directa con   abultado número de comunicadores.

Y sigue, la pandemia de enfermedades respiratorias, propias de esta estación invernal, así como  un recurrente número de  infestaciones por Covid-19. ¡A cuidarnos todos!