Torreón, Coahuila.- «Coahuila cuenta con las medidas preventivas y de protección
necesarias para enfrentar el flujo migratorio procedente del vecino país de norte de
migrantes deportados a las ciudades fronterizas de nuestro Estado al llegar a su término
la vigencia en el país del norte, el denominado Capítulo 42 el próximo 11 de mayo del
presente», afirma el Gobernador Miguel Angel Riquelme Solis.

Solo espera, que tal flujo «no sea extraordinario y orientado, como lo fuera en dos ocasiones
anteriores».

Preguntado afirmó este mediodía que, «la extinción del famoso Decreto no es la primera
vez que tenemos tal advertencia, pues desde hace algunos meses iba a fenecer».

Nos hemos preparado, afirmó, «con el Gobierno de Texas y hemos estado trabajado muy de
la mano con la Guardia Nacional para tener agilidad en su reacción ante la situación
migratoria de cada individuo, garantizar sus derechos y proteger a la población. Eso es lo mas importante y no excede en las capacidades de atención que tienen nuestras fronteras».

«Uno de los principales problemas que se tienen, es que cuando se dio un flujo
extraordinario migratorio fue el tema de la salud y su atención».

«Los migrantes arribaron a Coahuila y había mujeres embarazadas, adultos mayores y de
alguna forma la presencia también de familias con niños y eso nos metía en una fuerte
complicaciones, porque en esos momentos teníamos también en el tema de salud, de
cuidar a nuestra propia población y situación y la atención a los migrantes».

Poco a poco, dijo, «se ha ido arreglando esto, de tal forma que quienes tienen derecho a su
situación migratoria, a ser analizados por el Gobierno de Estado Unidos enfrentan un
proceso y los que no, muy rápidamente tenemos ya muy hecho el operativo para poder
retornar a quienes no tienen derecho a estar en nuestro territorio, que no traen permiso, nada y a quienes se les puede ofrecer e trabajo, si es que lo quieren en nuestro Estrado.

El procedimiento, afirmó, «ya lo tenemos muy hecho, aunque, no deja a veces de salirse de
las manos por el riesgo que se corre y que luego -los migrantes-, tratan de cruzar el río cuando
los niveles altos de este, ha tenido consecuencias fatales».

Enumeró que, «tenemos una frontera que cuenta con vigilancia aérea, con más de 300
elementos de dos ordenes de gobierno junto con los que aportan los municipios de Acuña y
Piedras Negras».

«En suma, Coahuila ya está enfrentando y creo que estamos preparados para ello y vamos a
ver como realmente viene ese flujo migratorio, que esperemos no sea extraordinario ni
orientado, como lo fuera en las dos anteriores ocasiones».