En el umbral de la Navidad, con una mayoría de humanos dispuestos a abrir un compás en sus vidas, de que este breve lapso del tiempo que Dios nos deja alcanzar y vivir, sirva a todos para encontrar la paz del alma, dejando atrás odios, envidias y resentimientos gestados con razones o sin ellas, en el pasado. Y en tanto en otra expresión del tiempo que hoy vivimos también, la mayoría de la población se dispone a festejarlo, siendo casi siempre los menores, ajenos a los rigores de la realidad quienes mejor lo disfrutan, no la mayoría digo, como fuera deseable pues serán muchos los menores también que desprotegidos de afectos y bienes vean con pena el arribo y término de los tiempos citados, no por ello por las más diversas razones, olvidados o desprotegidos en sus vidas, bien a través de sus agrupaciones o de manera personal, las que se suman las realizadas a cargo de los organismos gubernamentales, asociaciones de orden privado, algunos de origen religioso o bien sujetos con aspiraciones políticas en campaña, en las que todos juntos, resultan no ser aun suficientes para cubrir tan basta y creciente población que demanda su atención y cuidados que merecen tales vidas.
Tiempo de hacer cuentas, reflexionar sobre el arribo de un nuevo año, en el fluir eterno del tiempo en los que navegan nuestras vidas, analizar, preveer en lo posible el como sortear los escollos que dicen se avizoran en la realidad mundial y con ella la de nuestro país, en especial, los que están ligados al arribo dicen, del próximo y vociferante nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump y con ello no solo el calificar de terroristas a los cárteles de la droga, y el trato que dice estará aplicándoles, amen de los anunciados aranceles en el ámbito de la economía, pues con todo y lo extremo que esto represente, queda aun otro de mayores impactos, es decir, el que corresponde al de la inmigración, en el que anticipa la expulsión de los migrantes y un muro impenetrable para los que aspiren a ello en la frontera sur de EUA.
Y ya vemos que por precaución, solo por eso, Claudia Sheinbaum ya se puso las pilas y anuncia la creación de 25 albergues para dar cobijo a tal marea humana, en alguna de las ciudades mexicanas ubicadas en alguno de sus 3,000 kilómetros de frontera y de la cual Coahuila forma parte y que no se dude algunas de tales ciudades acabarán constituyéndose como ciudades santuarios. Dios nos agarre confesados y a las autoridades mexicanas también, pues el tema será una presión contante e ineludible en términos humanitarios, no por el solo impactarán en la economía de la región, en el tema de seguridad y delincuencia y también del sanitario.
Y en tanto en Torreón, rumores y más rumores, y que según sea su fuente de emisiones, cargados de insidia y mala fé en torno a los motivos de la prolongada ausencia del alcalde Román Alberto Cepeda Gonzalez en tan significativos tiempos de la escena política que le corresponde por ley, presidir y en los que algunos dice que el ahora alcalde reelecto «ha perdido» no solo la salud política, sino también la física, personal, pues ha ingresado por dos ocasiones en ocho días, al sanatorio médico más importante de la ciudad, si bien no se atreven a informar, como debe de ser su amplia y costosa área de Comunicación Social y Relaciones Públicas de tal ausencia y mucho menos, pero mucho menos Jorge Luis Cuerda Serna aun primer regidor del cabildo en funciones, y miembro de la siguiente, pues ya se sabe, es pequeño para todo, y mucho más para presidir las acciones de gobierno que con todo y la atonía que registran las actividades públicas deben cubrirse.
Por cierto en estas destaca la obligada Sesión de Cabildo, que no deberá ser por zoom, como están acostumbrados en las ultimas realizadas, de manera virtual con todo y la importancia que algunos temas revisten, haciendo suponer que la batuta quedó a manos de la actual Secretaria del Ayuntamiento Natalia Fernández es la relacionada con volver a dar posesión de su cargo como segunda regidora a Olga Xóchitl Cepeda, a quien el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le revocó la suspensión del cargo que le dictara el Congreso del Estado de suspenderla en tales funciones debido a que se encuentra sujeta a un proceso penal por su participación en un incidente menor en la que en compañía de su padre, el regidor electo Mario Cepeda Ramírez, le infringieran «lesiones levísimas» a Silvia Villarreal, entonces y aun funcionaria de muy sensible piel, y quien se desempeñaba allá por agosto del 2022 las importantísimas funciones de «acomoda sillas» en el área de Relaciones Públicas de la pasada administración estatal.
Silvia Villarreal, es por cierto, «sobrina política» de su hoy, defenestrado y controversial tío, regidor por cuyo motivo hoy tiene sobre su cabeza, cual Espada de Damócles el fallo que a su favor o en contra emitan autoridades para que pueda o no, tomar posesión del cargo como regidor integrante del próximo cabildo de Torreón el próximo 1 de enero del 2025, decisión importante, pues el citado alcanza ya sus casi 80 años de vida y como que ya no anda para encarar tales trotes.
Por cierto, se comenta que la señora Xóchitl Cepeda, con todo y la suspensión que registró su función como regidora no dejó de percibir por ello ni dietas, ni aguinaldo, pues entre los elementos a su favor esgrimió ante juzgadora no contar con otros ingresos propios que los que devengara como representante popular, si bien a su favor cuenta con los invaluables servicios profesionales del controversial litigante Omar Pulido.
Esperemos que para su bien y la del municipio, su alcalde Cepeda González, recobre siquiera la salud física que ahora tiene dicen, afectada y que la salud política tambien, cuando en puerta tiene el inicio de una nueva gestión que generosamente la ciudadanía le otorgó con su voto y en la que debe concluir no solo con nuevas metas, sino con las que se le quedaron en calidad de pendientes y que son varios que hoy son eso, meros pryectos en la que hoy esta por concluir. Dicen que estará sorprendiendo a los torreonenses con el reclutamiento de nuevas caras para desempeñar en los principales cargos, y otras no lo serán tanto, pues se menciona con el ahora «bendito» Pepe Ganem luego de su reciente visita al Vaticano acompañando a su matachina mayor, la Licenciada Martha Rodríguez, dicen que la cercanía alcanzada por el ex regidor en la administración del licenciado Olmos Castro arrastrará a su consentido Adelaido Flores al favor del edil, no descarando, aunque parezca imposible que acceda al cargo de titular de la Dirección Pública Municipal con quien hiciera en otros tiempos aciagos, singular mancuerna.
Y aunque faltan algunos días para llegar al 28 de diciembre, se rumorea que el Ingeniero Lauro Villarreal, está más que puesto para dejar el CEAS y regresar al cargo de titular del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento de Torreón, por ahora en manos de recomendados regiomontanos, en su Dirección y área técnica, los cuales, no muestran ni interés o afán alguno por mostrar los números a la ciudadania, pues nadan de muertito al igual que lo registra la singular administración de la más importante, por no decir unica paramunicipal de Torreón.
Y por hoy solo resta sumarnos a contar todos, con unos días de paz en compañia de nuestros amigos y seres queridos ¡Feliz Navidad!